Domingo de calor. Vamos con retraso en las coladas, por lo que la lavadora se pone en marcha temprano. Ordenamos las cosas, nos relajamos un poco y decidimos ir a un restaurante específico en Shinjuku, cuya especialidad es la lengua de vaca. Cenamos bien, y luego procedemos a comprar un rato, o al menos a detectar cosas que podríamos comprar antes de irnos. A las 5 de la tarde, vamos a visitar el Watering Hole, un bar de cerveza artesanal. La última vez que probamos el Watering Hole, era el 10º aniversario, y estaba lleno hasta los topes. Esta vez hay un espacio para 4. Disfrutamos de unas buenas copas, luego aparece el hambre, y decidimos probar la tarifa. Es más que justa, y pasamos un buen rato interactuando con unas personas encantadoras que trabajan allí. Un rato estupendo, ¡recomendamos el Watering Hole de corazón! Es entonces el momento de ir a relajarse a casa.
Leave a Reply